jueves, 28 de abril de 2011

EL PODER DE LA UNIDAD FRENTE A LAS CRISIS

EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA 01-05-2011

EL PODER DE LA UNIDAD FRENTE A LAS CRISIS

Amigo lector, ¿alguna vez ha sentido la ausencia de la solidaridad humana en momentos de desesperación, angustia o crisis emocional?, por supuesto que sí. El mejor ejemplo de unidad nos suministra el propio entorno natural, así las colonias de hormigas arrieras que recorren extensas superficies, cruzan puentes para almacenar sus alimentos y hacen todo lo que está a su alcance para cumplir el trabajo sin importar los obstáculos que se le presenten; de igual manera, los arbolitos de un bosque que se protegen entre sí, de los vientos huracanados y fusionados con sus ramas, evitan caerse.

En geopolítica mundial, qué decir de aquellos países como Alemania, Italia y Japón que luego de la Segunda Guerra Mundial quedaron devastados e inmediatamente se recuperaron; de los Estados Unidos, forjadores de grandes imperios económicos, de Chile en el terremoto de febrero del 2010, con una magnitud de 8,8 MW y de los valientes 33 mineros que quedaron atrapados a 700 metros de profundidad en agosto del mismo año y que sólo unidos pudieron ser rescatados con vida; aquella unidad de los ecuatorianos cuando en la guerra del Cenepa demostramos al mundo que éramos competentes de todo al grito unísono de “ni un paso atrás” para defender nuestros territorios; o, cuando la tricolor nacional, al grito de “si se puede” ha roto todos los mitos futbolísticos ganándoles a equipos supuestamente invencibles.

Estos paradigmas de unidad deberían ser aplicados o al menos liderados por amas de casa, maestros, estudiantes, transportistas, intelectuales, profesionales, empresarios, comerciantes y trabajadores en general para participar como actores directos y ser parte del control social de la cosa pública, invocado en reiterados pasajes de la “mejor Constitución del mundo”, como un medio de combate a la corrupción, injusticia, ignorancia, impunidad y pobreza.

Necesitamos una buena dosis de optimismo, honor y gran valentía, empezando por nuestros hogares, barrios, recintos, comunidades, parroquias, cantones y provincias para fortalecer esa unidad monolítica que nos permita enfrentar y acabar con todos esos altos índices de inseguridad ciudadana, la ausencia de obra pública, la indiferencia e ineptitud en los servicios públicos, el irrespeto a los valores tangibles e intangibles de la cultura de nuestros pueblos ancestrales y milenarios, la falta de acción de los representantes designados en las urnas y el incumplimiento permanente de las leyes.

La Constitución de Ciudad Alfaro, en su artículo 66, numeral 13 nos garantiza el derecho de asociación, de reunión y manifestación; de igual manera, la seguridad jurídica (Art. 82) y el derecho a la resistencia (Art. 98) cuando las acciones u omisiones estatales trastocan los derechos ciudadanos irrenunciables constitucionalmente.

Entonces, antes que gastarse varios millones de dólares en consultas innecesarias que no resuelven problemas acuciantes de una injusticia impune y maloliente, mejor sería crear esa cultura de unidad de todos los ecuatorianos por nuestro bien y por el de nuestras futuras generaciones. La minga como costumbre ancestral tenemos que rescatarla y utilizarlo como medio para frenar el abuso del poder, la falta de atención a nuestros derechos y el riesgo cada vez inminente de nuestras vidas. La historia demuestra que solos no llegamos a ningún sitio, por eso siempre se dice “que la unión hace la fuerza” o “unidos somos más”.

SAÚL MAYORGA PUMA

jueves, 21 de abril de 2011

FIRMEZA CORPORAL Y EJEMPLO DE AMOR

EL AMIGO DEL HOGAR
Guaranda, 24 - 04 -2011

FIRMEZA CORPORAL Y EJEMPLO DE AMOR

Son las 08H30 del día domingo 3 de abril del 2011, mientras camino con mi esposa por los fríos pasillos del Hospital Eugenio Espejo, escucho una voz que llama por mi nombre y es precisamente el padre de dos jóvenes internos de esta casa de salud, que se recuperan de un transplante de riñón, ellos son  Hugo y Anita Gómez Zapata, oriundos de la parroquia Magdalena, cantón Chimbo, provincia de Bolívar; el primero, de 26 años y  miembro activo de la Policía Nacional en calidad de donante; y, Anita de 29 años, receptora de la víscera, de profesión maestra parvulario.

Estando en el elevador, siento una necesidad intrínseca de vivificar el estado de ánimo de nuestro amigo y evitar la tristeza destellada en sollozos de un padre que suplica y agradece al Creador por la vida, la convalecencia de sus hijos y la solidaridad humana; e, inmediatamente exalto mi rogativa a Dios para que conceda todas mis fuerzas y el suficiente valor al momento de ingresar hacia los pacientes, pero cual mi sorpresa, que entre seis internos que observo desde la puerta principal, hay uno que sonriente pronuncia mi sustantivo y saluda con su manito derecha, él es Hugo, emocionado al verme y con todas sus energías de un hombre descendiente de una cultura rebelde como los chapacotos; e, inmerso en los ideales de las filas policiales, sin ningún resquemor ni difidencia revela que fue su decisión donar el riñón a su hermanita, aún antes de someterse a los exámenes para comprobar su estado de compatibilidad y sin pensar en el desenlace final, pues lo único que le importaba era la vida de Anita y la tranquilidad de toda su familia; pero ese deseo no quedaba ahí, un joven que solicita permiso a la Institución Policial para intervenirse quirúrgicamente, él, conmovido internamente por su dolor corporal y con una leve limitación física por toda su vida, todavía exhortando tranquilidad a sus familiares, amable y sonriendo con las visitas; algo extraordinario que los seres humanos de esta sociedad aún incomprensible deberíamos adoptar como una gesta paradigmática frente a las diversas conductas y comportamientos de nuestros congéneres.

Al despedirnos de Hugo y echando de ver del buen estado de salud de Anita, rumbo a nuestro hogar por la Av. 6 de Diciembre con dirección sur - norte, mi esposa no deja escapar su asombro por el espíritu valeroso y vocación de solidaridad de Hugo, que en su plena juventud haya tomado tan inconcebible ultimátum, suma de verdadero amor para su hermanita y una medida con dos únicos resultados: la vida o la muerte. A medida que avanzo en el auto, permanezco exhausto y pensativo por unos segundos, pero en mi reacción puedo percibir únicamente que detrás de todo esto, hay un Dios que nos coloca un camino escabroso y nos brinda esa posibilidad abstracta de entender hasta dónde somos capaces los seres humanos como respuesta a nuestra paciencia, sacrificio, respeto, perseverancia, humildad, fe y solidaridad.

Una acción de esta naturaleza merece el reconocimiento de toda la sociedad, como se hace con los grandes deportistas, con los héroes que honran su vida por la defensa del honor patrio, así también hay que reconocer el ejemplo de estos jóvenes provenientes de un pueblo chico pero grande en cultura, sentimientos y solidaridad; de igual manera, el profesionalismo del Dr. Wilson Salazar, Líder de nefrología, diálisis y transplante, su equipo médico, enfermeras, anestesiólogos y personal administrativo del Hospital Eugenio Espejo; y, al Programa de Protección Social del Ministerio de Salud Pública, por recuperar la vida de Anita y el pronto retorno de Hugo a las filas policiales, pero a una dependencia que le garantice suficiente equilibrio entre las actividades laborales y su salud, haciendo uso de las normas y principios del buen vivir. Felicidades y mucho tiempo de vida, Hugo y Anita.

Saúl Mayorga Puma
mayorga_saul@yahoo.es

miércoles, 13 de abril de 2011

INFINIDAD DE DERECHOS CONSTITUCIONALES

EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA, A 10 DE ABRIL DEL 2011

INFINIDAD DE DERECHOS CONSTITUCIONALES

Por el titular de este artículo, nos llevaría a pensar que estamos invadidos de derechos constitucionales, – teóricamente así es, pero en la práctica resulta todo lo contrario, por ejemplo, el artículo 11, numeral 6 del Código Constitucional señala que “Todos los principios y los derechos son inalienables, irrenunciables, indivisibles, interdependientes y de igual jerarquía”, es decir que ningún derecho por más elemental que sea, puede estar por encima o por debajo de otro.

Lo inalienable,  es lo prohibido de enajenar y como tal un derecho esencial que no puede ser negado o trastocado a una persona por ningún gobierno ni autoridad; el principio de la irrenunciablidad, también un derecho que limita la autonomía de la voluntad de la persona para no contrariar la norma constitucional y legal, por ejemplo un trabajador no puede renunciar al salario, los aportes al IESS, al décimo tercer sueldo, etc.; lo indivisible, que no es susceptible de división; la interdependencia, un derecho en que todas las personas sean emocional, económica y/o moralmente “independientes”; y, la igualdad en la jerarquía, consagra la equidad ante la ley, la no discriminación o la ausencia de privilegios y la igualdad de libertad, como el derecho de todo individuo a disfrutar de su libre albedrío.

De igual forma, la Constitución en su artículo 1 declara al Ecuador como un Estado constitucional de derechos y justicia, concordante con el 11, numeral 9, que dice: “El más alto deber del Estado consiste en respetar y hacer respetar los derechos garantizados en la Constitución”; estupendo, pero sólo desde el punto de vista doctrinario ¿verdad?, dado que desde lo pragmático y cuando los usuarios tenemos que hacer extensas columnas en los juzgados, ventanillas públicas y organismos de control, para reclamar nuestros derechos, simplemente se esconde la Constitución de Montecristi, porque a sus administradores les da lo mismo dejar que los interesados esperemos meses, años, lustros y hasta décadas para que luego nos digan que los derechos requeridos han sido negados y muchas veces “los inocentes presos y los culpables libres” Con esta forma de operar la justicia, para los abogados honestos, éticos y con mucha dignidad, no nos sirve la erudición de los conocimientos ni los títulos del más avanzado nivel, más vale “el chanchullo o el guiño del ojo”.

Esta realidad que vivimos los ecuatorianos, se debe a que la gran mayoría de nuestros legisladores llegan al Palacio Legislativo sin la mínima preparación ni conocimientos en materia de legislación y fabrican leyes intrascendentales, muchas de ellas letra muerta, otras inaplicables y una que otra en proceso de depuración a través de reformas.

Si todos los derechos de la persona son irrenunciables y de similar jerarquía, sólo se requiere tener las pruebas materiales, documentales y testimonios para que judicialmente sean refrendados los reclamos ciudadanos, sin necesidad de esos juicios tediosos, impacientes y de tramitación infinita. Ya es hora que se cumpla la Constitución y no solamente aparezca como la mejor conquista de Montecristi proclamada a los 4 vientos, como un canto a la vida y la mejor del Planeta.


SAÚL MAYORGA PUMA
mayorga_saul@yahoo.es

martes, 12 de abril de 2011

TURISMO RURAL Y DESARROLLO SUSTENTABLE EN BOLÌVAR

TURISMO RURAL Y DESARROLLO SUSTENTABLE EN BOLÌVAR
EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA, A 3 DE ABRIL DEL 2011

La región centro andino y subtropical que lleva el nombre del Libertador, con sus siete cantones y diecinueve parroquias rurales, además de constituir el granero del país, se ha convertido en fuente natural de riqueza renovable y desarrollo sustentable a través del turismo comunitario, aún inexplotado por la gran mayoría de poblaciones de la provincia.

Cierto es que existen trabas de empresas, agencias y organismos vinculados con el turismo para acceder a la diversidad de especies naturales de flora y fauna, arguyendo largas distancias y falta de promoción, sin embargo cabe señalar que de Quito a Guaranda existen 240 km y 4 horas de viaje, y mucho menos de Guayaquil; de ahí que, tan solo un día se requiere para conocer la provincia y un 30% de las maravillas naturales. En Guaranda, a 29 Km está Salinas con sus vertientes de agua salinas y sus minas de Tomabela, las fábricas de tejidos y empresas de quesos y embutidos; en Chimbo, a 5 Km está el Santuario del Guayco, uno de los mejores de Latinoamérica; siguiendo al sur por la Vía Flores se encuentra el extenso altiplano de Cochabamba 3.200 m y el cerro de Tundaloma, de donde, en día claro es posible contemplar desde un mismo punto al Rey de los Andes y las extensas montañas de Tungurahua, Chimborazo y Bolívar; y, por el otro lado, las provincias de Manabí, Guayas y Los Ríos. En San Miguel de Bolívar, encontramos la Cordillera de Camino Real, la gruta de la Virgen de Lourdes, los bosques protectores de Cashca Totoras, los Arrayanes y la cascada milagrosa de Balsapamba; en Chillanes está localizada la zona arqueológica de la Tribu Chillanes, el bosque de la hacienda Tiquibuso y las espaciadas franjas de producción agropecuaria; en Caluma, capital de la naranja están algunas cascadas, bosques, riachuelos, puentes colgantes, hosterías y diversidad de comidas típicas; en Las Naves, la cascada Bellavista, ríos de aguas cristalinas para nadar, pescar, boyage, canotaje y rafting; y, en Echandía, la cascada Los Laureles, la laguna de Río Verde, avistamiento de aves y mamíferos en estado silvestre, etc.

Con el mejoramiento y terminación de las vías Chillanes - San José del Tambo; Guanujo - Echandía; Chimbo, Magdalena, Balsapamba y los enlaces Gualasay, Llamaquinche, Telimbela y  Caluma, estamos seguros que la explotación turística de la provincia llegará a convertirse en la primera fuente para el buen vivir de nuestros hermanos bolivarenses, y para ello es necesario crear la cultura de turismo a través de campañas publicitarias; el diseño de paquetes turísticos como un medio de autogestión de las juntas parroquiales; y, la urgente exigencia a la burocracia del Ministerio de Turismo para que visiten y conozcan primero las riquezas nacionales de esta parte central de la República.

SAÚL MAYORGA PUMA

NUEVAS TECNOLOGÌAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN – NTIC EN BOLÍVAR

NUEVAS TECNOLOGÌAS DE LA INFORMACIÓN Y LA COMUNICACIÓN – NTIC EN BOLÍVAR

EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA, A 27 DE MARZO DEL 2011

Si desde la histórica Batalla de Camino Real de Bilován por la consolidación libertaria de 1820 a esta época, suponiendo que estuviera viva nuestra heroína Josefina Barba Chaguango, que no sabía leer ni escribir por temor de sus padres a las cartas con sus novios, estaría asombrada por el acelerado desarrollo tecnológico de las comunicaciones en casi la mayoría de pueblos, obviamente con las deficiencias de infraestructura; el teléfono llegó por primera vez a Ecuador en el año 1884 a través de cable submarino desde Panamá cruzando Chile, Colombia, Ecuador (Salinas); pero, recién a comienzos del siglo XIX, el altiplano bolivarense pudo regocijarse con el uso telegráfico con cable aéreo entre cantones y parroquias de la provincia.

En la década de los 80 se pudo apreciar las primeras copiadoras, telefonía fija, fax y algo de mejoría en las radios; la televisión llegó un poco antes, años 70, pero ha tenido que pasar mucho tiempo para arribar a la era de la telefonía celular, comunicaciones satelitales, audiovisuales, video conferencia, sistemas de contactos y la revolución tecnológica de los últimos tiempos como el Internet, el correo electrónico y el uso de las redes sociales, que si bien constituyen un soporte fundamental para el desarrollo del conocimiento humano, aún no están presentes en algunas localidades; y, si lo están, éstos no son bien aprovechados como en los países industrializados, donde el internet se ha convertido en herramienta básica para la propia supervivencia del ser humano, ya que a través de él, podemos prepararnos, identificarnos con nuestra propia cultura, acceder a plazas de trabajo, saber lo que pasa en el mundo y hasta aproximarnos a estudios virtuales para obtener un título académico.

Desde mi particular punto de vista, doy gracias a Dios por haber concedido mucha sabiduría e inteligencia a los creadores de estas redes de enlace universal (Vinton Cerf y Robert Kahn), que han permitido reencuentros familiares, localización de compañeros y amigos de escuela, colegio y universidad, también de trabajos, optimización de tiempos, descubrimiento de oportunidades de negocios y hasta sentir la emoción al ver fotografías, videos y lugares de la tierra que nos vio nacer. Bien decía mi padre: “La obra más grande de Dios, es haberle dotado de inteligencia y sabiduría al ser humano” (Lápida del Campo Santo Magdalena).

Los organismos públicos y privados vinculados con la educación y la cultura de la provincia como escuelas, colegios y la Universidad Estatal de Bolívar, tienen la imperiosa obligación de fortalecer la enseñanza de educación digital, orientar, concientizar e implementar el buen uso de estas herramientas tecnológicas como medio indispensable del buen vivir y la sostenibilidad socioeconómica de todos sus habitantes, aunque todavía queda mucho por hacer en el eje de las comunicaciones viales y la apertura de caminos vecinales para aprovechar la riqueza agropecuaria de nuestras impresionantes tierras frías y subtropicales de la provincia.


SAÚL MAYORGA PUMA
mayorga_saul@yahoo.es

LA CULTURA CHAPACOTENSE Y SU COSMOVISIÒN

LA CULTURA CHAPACOTENSE Y SU COSMOVISIÒN

EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA, A 20 DE MARZO DEL 2011

El nombre Chapacoto es un topónimo que significa pertenencia de tierras para el espionaje de seres extraños. Este grupo llegó a ocupar las extensas zonas de San Sebastián, parte de la Asunción, Magdalena, Cochabamba hasta la provincia de los Ríos; su descendencia proviene de una fracción de los Chimbus divididos en comarcas para controlar la invasión de otros clanes, algo parecido a los desplazamientos de las tribus orientales en tiempos de Abraham, Jacob y Moisés. Otra parte fueron los asancotos que poblaron Tanizahua hasta los límites de Los Ríos y Cotopaxi.

Al pie de la parroquia Magdalena estuvo levantada la ciudad de los chapacotos. Con la invasión incásica año 1460, el inca Huamàn Achachi originario del Cusco, hermano de Túpac Yupanqui y tío abuelo de Atahualpa, haciendo el papel de conciliador con los indómitos y guerreros del Imperio Chimbo, formó la comarca de los Achachis y nombró emperador al de mayoría de edad, con el grado de Achachi I. Toda la ciudad chapacotense desapareció con el terremoto de Chimbo en el año 1797 y posteriormente se levantaron algunas viviendas al pie del Machay hoy Magdalena.

Los chapacotos fueron una descendencia de estatura muy elevada, promedio 1,80 m, inteligentes y muy hábiles para las artesanías en cerámica, lana, madera, etc.; su cosmovisión: agua, fuego, tierra y aire; guerreristas y sedendatarios por naturaleza; sus territorios eran  lugares sagrados; la medicina fue una fuente de sabiduría a través de las plantas nativas. El tratamiento de enfermedades y los problemas de baja autoestima adquirió notable fama, a tal punto que emperadores y caciques del Reino de Quito acudían a los médicos chapacotos, para ser atendidos desde ritos religiosos a través de sus dioses Sol, Luna, cerros Machay, Susanga, Pucará, Tundaloma, Parcurco y Cerro Grande;  limpias con animales y hasta el vaticinio de sucesos y caída de reyes, situación que con el transcurso de los años y en plena época del coloniaje fue aplicado por los famosos curanderos con vocación nata para el dominio de las ciencias ocultas, conocido luego a dichos personajes como “los brujos”

Luego de mucho tiempo de haber permanecido como algo recóndito estos tesoros culturales, un grupo de profesionales, empresarios e intelectuales residentes en distintos lugares del país y el exterior, apoyados por la juventud altiva y rebelde de este rincón ancestral, sentimos esa necesidad intrínseca de fortalecer aquella identificación con nuestra propia cultura chapacotense, orgullo del Imperio Chimbo y protagonista esencial en la formación y consolidación de este Ecuador pluricultural, multiétnico, soberano, libre y democrático.


Atentamente,


SAÚL MAYORGA PUMA
C.C. 0200607661
mayorga_saul@yahoo.es

LA VÌA FLORES: 40 AÑOS DE ABANDONO

LA VÌA FLORES: 40 AÑOS DE ABANDONO

EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA, A 13 DE MARZO DEL 2011

Increíble, pero cierto. La provincia de Bolívar ha sido la precursora de tres acontecimientos históricos que han dado lugar a la formación del Estado ecuatoriano, a través de la existencia milenaria del Imperio Chimbo; la independencia del dominio español con la Batalla de Camino Real (Bilován), 9 de noviembre de 1820; y, la construcción de la primera red de transporte (Vía Flores) que unió la sierra con la costa, atravesando los parajes de Chimbo, Asunción, Magdalena, Cochabamba, Gualasay, Torneado, Cristal, Balsapamba y Babahoyo, en el gobierno de Antonio Flores Jijón, año 1890. Por esta vía llegó el primer automóvil de Guayaquil a Quito.

Sería muy ameno describir estos temas de palpitante interés nacional, pero al momento sólo me voy a referir a la Vía Flores que en la actualidad luce abandonada desde hace más de 40 años, cuando la compañía Hidalgo & Hidalgo Constructores incumplió el contrato y dejó completamente destruida, además de los irreparables daños al ecosistema y la desaparición de las lagunas naturales en Cochabamba.

Esta vía que fue concluida a pico y pala en el año 1930, gobierno del Dr. Isidro Ayora, ha servido por muchos años, de enlace para el intercambio comercial entre el puerto principal y las regiones de la sierra y oriente; también ofrece otras ventajas como ahorro de tiempo y combustible (una hora y media menos en relación con la Aloag – Santo Domingo o Ambato – Pallatanga), resistencia a los fenómenos naturales y el deleite de las bondades naturales flora y fauna silvestre, así como la majestuosidad del paisaje que nos permite ver de un mismo punto al Rey de los Andes, 3 provincias de la sierra y 3 de la costa ecuatoriana.

Hace tres años, el señor Presidente Constitucional de la República, en una de las cadenas sabatinas realizada desde uno de los cantones de la provincia de Bolívar comprometió los recursos para la ampliación y asfaltado de esta vía, pero recién en el último trimestre del 2010, se pudo observar algunos topógrafos del Ministerio de Obras Públicas, en la toma de datos y colocación de puntos de señalización. El año pasado estuvo el Ministro de Obras Públicas David Ortiz en la parroquia Magdalena, llegando a ratificar el compromiso presidencial, pero hasta el momento sólo palabras y nada de hechos.

Por otro lado, llama poderosamente la atención que las autoridades provinciales como Prefecto, Director de Obras Públicas, Concejo de Chimbo, juntas parroquiales y asambleístas bolivarenses, no le dicen la verdad al pueblo culto, honrado y trabajador de la provincia, a tal punto que aquel cuasi proyecto ni siquiera consta en la página Web del Ministerio de Transporte y Obras Públicas.


Atentamente,


SAÚL MAYORGA PUMA
C.C. 0200607661
mayorga_saul@yahoo.es

¿ESTAMOS IDENTIFICADOS CON NUESTRA CULTURA?

¿ESTAMOS IDENTIFICADOS CON NUESTRA CULTURA?

EL AMIGO DEL HOGAR
GUARANDA, A 27 DE FEBRERO DEL 2011 

Siento desagrado cuando observo que ciertos grupos o conglomerados descendientes de potenciales culturas milenarias, ya por conveniencia o cualquier clase de estímulo, aceptan la aculturación de costumbres foráneas; renunciando su propia lengua, su música, su vestimenta, su entorno físico y su propia identidad; en muchos casos inclusive desisten de sus apellidos ancestrales para reemplazarlos por los del mestizaje, dando a entender que con estos cambios van a mejorar su estatus social y su estilo de vida.

Todas estas  asimilaciones de elementos culturales de un grupo humano por parte de otro, suceden en diversas partes del planeta, no se diga en nuestro país y con mayor frecuencia en la provincia de Bolívar, como consecuencia de la migración interna y externa, eso sí, en medio de una diversidad de riquezas pluriculturales y multiétnicas, desde lo arqueológico hasta la antropología en lo biológico, físico, social y lingüístico.

Por historia conocemos que el callejón interandino bolivarense estuvo habitado hace miles de años y que por allá en el siglo VII, d. C. existió el País Chimbo, según la historia del Padre Juan de Velasco, integrado por los achachis, asancotos, chapacotos, chilanes, chimas, guanujos, guarangas, simiatugs, tomabelas, etc. previo a la invasión incàsica y posterior colonización española; pero lo asombroso es que si consultamos a un grupo humano de generación actual sobre su identidad entre los personajes, vestimenta y música solariega con relación a las vivencias modernas; su elección será por la última, no por desprecio a la cultura ancestral sino por desconocimiento, derivado de los precarios programas curriculares, docentes sin la mínima preparación y formación académica en valores cívicos, morales, éticos,  cultura, prehistoria y transculturación; entes de cultura politizados y sin atención de recursos; y, un Ministerio de Educación carente de políticas de Estado para impulsar el rescate de raíces compatibles y la sostenibilidad de valores culturales.

Bueno sería que a través de la actividad deportiva que se transmite en prensa, radio, televisión y redes sociales se incentive a sus actores enfatizando la inteligencia, heroísmo y el valor de la sangre Shyri o Huancavilca, como lo hacen otras culturas latinoamericanas; tupinambis en Brasil, araucanos en Chile, charrúas en Uruguay, guaraníes en Paraguay, la sangre Azteca en México y los incas en Perú.

Un ser humano que ha perdido sus raíces prehistóricas o renunciado a sus ancestros, es más proclive a ser considerado huérfano de identidad y con repercusiones graves para sus futuras generaciones de muchos años hasta lograr consolidar  su  transculturalidad.

¿Cómo puede un ciudadano reclamar los derechos de su entorno y luchar por encontrar mejores días para sus futuras descendencias si no sabe de dónde viene ni quién es? Entonces surge esta interrogante ¿Estamos identificados con nuestra propia cultura? La Casa de la Cultura Ecuatoriana “Benjamín Carrión” Núcleo de Bolívar, la Universidad Estatal de Bolívar, colegios y escuelas de la provincia, tienen la respuesta.

Atentamente,


Dr. Saúl Mayorga Puma, MSc.
mayorga_saul@yahoo.es

FUNDACIÓN DE LA PARROQUIA CHAPACOTO - MAGDALENA

FUNDACIÒN DE LA PARROQUIA CHAPACOTO – MAGDALENA

EL AMIGO DEL HOGAR
Guaranda, a 20 de febrero del 2011

ANTECEDENTES.- Existe abundante información bibliográfica sobre los asentamientos humanos que poblaron la Sierra Centro de Norte a Sur de la Cordillera de Los Andes perteneciente a los Quitus (siglo VII d. C.), conquistados por los Caras – Shyris e integrados al Reino de Quito. A la época de la invasión de los Incas (1460), las tribus descendientes de estas etnias estaban formados por los siguientes pueblos: Pastos, Quillacingas, Tulcanes, Huacas, Caranquis, Pimampiros, Otavalos, Cayambis, Cochasquíes, Quitus, Panzaleos, Latacungas, Mochas, Puruhaes, Chimbos, Cañaris, Paitas, Zarzas, Huancabambas y Ayabacas, pasando a formar parte del Chinchaysuyo – Ecuador que le correspondió a Atahualpa luego del testamento de su padre Huayna Capac.

De estos emporios (Chimbos e indios Mitimaes de Guayacondo) situados a lo largo del Río Guayco, surgieron diversos ayllus, que dieron lugar a integraciones de los Asancotos, Chapacotos y Achachis, distribuidos desde el Río Chimbo por la extensa superficie de San Sebastián, Asunción, Magdalena, Achachi, Tillirungo, Cochabamba, Gualasay, Telimbela, hasta la provincia de Los Ríos.

Entre los siglos IX y XV d. C., los Chapacotos, poblaron todas las tierras que hoy corresponden a la jurisdicción Magdalena hasta Telimbela y Caluma, afirmación corroborada por los estudios antropológicos y evidencias materiales de vasijas de barro, osamentas y jeroglíficos en pizarras de légamo, encontradas durante la reconstrucción de la Vía Flores, 40 años atrás, lo que hipotéticamente se concluye que unas 370 familias construyeron la gran ciudad Chapacotense desde Panchigua, Guayco, Guayau, Achachi, Cochabamba, Gualasay hasta Babahoyo.

Tras la llegada de los españoles a territorio incásico (Chinchaysuyo -Ecuador), año 1528, Sebastián de Benalcázar en caminata hacia El Dorado, desde la provincia de Los Ríos, atravesó la Esmeralda, Camino Real (Bilován) hasta llegar a Quito, pero a mitad de camino se encontró con las tribus guerreras de los Chimbos, Tomabelas y Mitimaes, que luego de intensa resistencia a la misión española, Benalcázar y sus expedicionarios decidieron fundar el asiento de San José de Chimbo el 10 de agosto de 1534, 117 días antes de la fundación española de San Francisco de Quito, el 6 de diciembre de 1534. Entre los años 1600 y 1800, se erigieron  como parroquias de Chimbo, los asentamientos humanos de Asancoto y Chapacoto.

Entre los siglos XVII y XVIII, varias tribus o ayllus de Chimbo y básicamente los   Chapacotos, se vieron influenciados por la presencia de españoles y criollos que asomaron en calidad de curas, corregidores, caciques y jefes de tribus, tal fue así que el 11 de abril de 1806, el cura de la Doctrina de Chapacoto doctor don Mariano Tellez de Quintanilla presentó una denuncia ante don Gaspar de Morales, Corregidor de Guaranda, en contra del doctor don Agustín Tigsilema, Cacique Principal y Gobernador Ordinario de Chapacoto, estableciendo varios cargos en su contra, por  malos tratos a su consorte, el continuo vicio de la embriaguez, el juego de altanería en que vivía, por inquietar a libar a los indios Chapacotos, haciendo que no oigan misa, además de otros cargos.

Según el relato de “Etnohistoria del Corregimiento de Chimbo 1557 – 1820” la parroquia Chapacoto tuvo la influencia de las siguientes familias: Barragán, García, Castillo, De la Torre, Montenegro, Erazo, León, Vega, Montoya, Román, Benavides, Coronel, Chávez, Criollo, Jaramillo Tavera, Tello, etc.

FUNDACIÓN.- Mediante Decreto Supremo expedido por el Dr. Gabriel García Moreno, el 3 de marzo de 1860, se creó el cantón Chimbo, en la provincia de Chimborazo, integrado por las parroquias San José, San Miguel, Asancoto, San Antonio, Chapacoto, Bilovàn y Chillanes, fijándose como cabecera cantonal en San José. El 6 de octubre de 1860, el Dr. Gabriel García Moreno, expidió otro Decreto Supremo, por el cual, el cantón Chimbo, conjuntamente con Guaranda, Pueblo Viejo, Vinces, Baba y Babahoyo y las parroquias Quevedo y Zapotal pasó a constituir la provincia de Los Ríos; pero, mediante Ley de División Territorial expedida por la Convención Nacional el 17 de abril de 1884, sancionada por el Ejecutivo el 23 de los mismo mes y año, publicado en el Folleto de 1884, el cantón Chimbo, integrado por las parroquias San José, Asancoto, Chapacoto, Telimbela y San Antonio, definitivamente pasó a formar parte de la provincia de Bolívar.

El 26 de marzo de 1897, la Asamblea Nacional del Ecuador expidió una nueva Ley de División Territorial, la cual fue sancionada por el Ejecutivo el 14 de abril del mismo año y publicado en el Folleto de 1897, así como en el Registro Oficial No. 350 de 22 de abril de 1897, en la cual se cambió la denominación de la parroquia Chapacoto por el de Magdalena, como nombre de bautizo de Santa María Magdalena de Chapacoto, cuya imagen fue traída desde Guayaquil en hombros por el camino de la Vía Flores y entregada a los fieles del culto pueblo magdalenense, conocido como la Capital Cultural de la Provincia de Bolívar.


Dr. Saúl Mayorga Puma, MSc.
mayorga_ saul@yahoo.es