EL AMIGO DEL HOGAR
Guaranda 14-08-2011
La corrupción agresiva generada en varios estamentos estatales y la constante depredación de los recursos naturales no renovables, son dos graves problemas que diariamente distraen la atención de millones de personas del planeta, quienes nada podemos hacer frente a organismos multilaterales representados por mafias de poder que contagian las estructuras de países subdesarrollados, supuestamente vigilados por decenas de entes de control, pero superados en gran medida por las instituciones del chantaje, la coima, el enriquecimiento ilícito, el tráfico de influencias, las cuotas de poder, la compra de conciencias y las decisiones adoptadas por mayorías simples aún en contra de la lógica, el sentido común y la razón humana.
En nuestro país existen más de 14 organismos de control estatal, sólo uno teóricamente sancionador administrativo como la Contraloría General del Estado y el otro, la Función Judicial , con una pobre y putrefacta justicia tan echada por los suelos en los últimos tiempos; los demás organismos, simples entes burocráticos y meros presentadores de informes como esa Comisión Cívico de Control de la Corrupción, creado en el gobierno del tristemente recordado doctor Alarcón y reemplazado por el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social, con más de 8.200 denuncias presentadas y ninguna resuelta.
Otro de los temas de permanente discusión y debate constituye la contaminación atmosférica producida por la acumulación del dióxido y monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno y azufre; el calentamiento global de la tierra, cuyas temperaturas está aumentando a un ritmo cada vez mayor; y, el desgaste de la capa de ozono que sirve a los seres vivos como un paraguas protector frente a los peligrosísimos rayos ultravioletas que podría causar debilitamiento del sistema inmunológico, daños en la vista, y un aumento de casos de cáncer de piel.
También tenemos el efecto invernadero como consecuencia del incremento espectacular del contenido en anhídrido carbónico en la atmósfera por la quema indiscriminada de combustibles fósiles, como el carbón y la gasolina, y la destrucción de los bosques tropicales. Si no se para el calentamiento en general, el nivel del mar puede subir entre 20 y 40 cm a principios del siglo viniente. Un incremento minúsculo del nivel del mar podría tener consecuencias catastróficas, por ejemplo, Holanda ha ganado gran parte de su territorio a las aguas y muchas zonas se encuentran por debajo del nivel del mar; las islas Maldivas; el océano Indico, también se encuentran a un nivel muy bajo. Sólo que el mar subiera un metro, las islas desaparecerían por debajo de las aguas. Si el aumento del nivel del mar fuera entre 4 y 8 metros , las consecuencias serían aun más catastróficas.
En nuestro caso, la corrupción hay que combatirlo, pero se requiere reformar la Constitución de Montecristi, aplicar estrictamente la ley penal y sancionar a los fiscales y jueces prevaricadores y chantajistas; y, sobre la extinción ecológica, que se aplique como política de Estado en escuelas, colegios y universidades el conocimiento de la materia de medio ambiente, a través de campañas de concientización publicitarias, cadenas radiales y televisivas.
Dr. Saúl Mayorga Puma, MSc.
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